Suerte de un matador de caracoles.
Capataz de una cohorte de hierbas fugaces
Y en la niebla, vespertina nube
Tahúres mancos
Flautistas sin travesera
Espacio blanco
Ancho
Largo
Espeso, muy espeso.
Rugido de mar arbolado en una copa de cristal
Latido incombustible
Dictado de una memoria que no reconoce realidad.
Calabera.
25 mar 2012
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